10.
Yo soy el no, la apuesta en
contraparte, pesado el sentir y hondo el llanto. Yo soy la luna en eclipse,
agua estancada; tú, piedra que ondas mi liquidez en mi noche. Tú, rama dorada
dibujando vuelo, cercenando dudas, aireando sombras. Tú, mano suave en hombro
cargado, peso ligero en mi conciencia, apenas soplo. Nosotros, nudo corredizo,
corriente nudosa, tronco leñoso de nudos apretados, suerte segura, muerte
cercana, reloj que aún da campanadas retrasado. Nosotros eso: ardor, nudo,
retraso, somnolencia. Nosotros rosal, días sin pan, manos sucias y pies
descalzos. ¿Ellos quiénes son? ¿Acaso alguien, acaso algo? ¿No serán más bien
pesadillas? ¿No serán más bien los cuentos que nos narraron de pequeños, en las
noches invernales, junto al fuego? ¿No serán más bien ecos sin voces, sombras
sin cuerpos, humos sin fuegos? ¿No serán? No. No serán.
No hay comentarios:
Publicar un comentario