domingo, 29 de noviembre de 2015

sábado, 21 de noviembre de 2015

A LA CAZA DE LA MUJER, de James Ellroy




Antecedentes.
Descubrí una biblioteca de intercambio de libros. Sí. Insólito en esta metrópoli cada vez más parecida a Gotham (a sus suburbios, más bien). Y decidí lanzarme a la aventura con dos libros de Angela Carter bajo el brazo, para cambiarlos (¿"truequearlos"?). Como si de la Biblioteca de los Libros Perdidos se tratase, dejé con el amable bibliotecario los dos angelicales libros y me dispuse a entrar en la jungla.
Y ellos me eligieron. Como suele pasar.
 
Hechos.
De James Ellroy había leído la trilogía de Lloyd Hopkins (Sangre en la luna,1984; A causa de la noche,1984; La colina de los suicidas, 1985) con tan buen sabor de boca que me lancé a leer el Cuarteto de los Angeles (La Dalia Negra, 1987,imprescindible) y la Trilogía de los Bajos Fondos de EEUU.
¿Todo esto para qué? Pues para decir que he leído bastante de James Ellroy, así como 7 novelas, por lo menos.
Pero ésta no. No cuela.
 
Consecuencias.
En un tono semiconfesional, James Ellroy nos cuenta sus aventuras en pos de encontrar la mujer de su vida, mezcla de su madre, de la Dalia Negra y de otras mitificaciones hechas por el narrador.
Me dio la impresión de que el novelista tenía a su izquierda, mientras escribía, un listado de nombres de mujeres, y su empeño era en ir rellenando varias líneas entre un nombre y otro. A veces 5 líneas, a veces 20 líneas, a veces un capítulo.
La rutina es la siguiente (por ejemplo): "conocía a Laura en el tren; vestía abrigo claro y zapatos de tacón de aguja; su sonrisa era perfecta; bajé del tren; miró por la ventanilla y sonrió; yo también". Y tres líneas después: "cuando me presentaron a Carmela, sus orejas me llamaron la atención".... Y así durante las 150 páginas que llevo leídas (por suerte es novela corta, 226 páginas).
 
No la terminaré. Esta vez no, señor Ellroy. Si anda corto de dinero, escriba una novela de serie negra para ir tirando. Sin más pretensiones. Como las de antes. O con las pretensiones de ser "la novela americana", como las otras. Pero ésta no. No cuela.